¿El mejor amigo de una persona embarazada? Su almohadilla térmica, obviamente. Gestar a un ser humano trae consigo nuevos tipos de dolores y molestias, desde las piernas hasta la espalda y el cuello. Por lo tanto, la clave es una almohadilla térmica versátil que se pueda mover alrededor del cuerpo. “No se lo digas a mi hospital, que lo prohibió, pero lo metí en mi habitación después del parto y realmente me ayudó a aliviar el dolor del parto”, dice GlamourEs McNeal.