Mientras que los singapurenses se enfrascaron en conversaciones sobre un mural que representa a una mujer samsui fumando, un artista en Malasia no tuvo tanta suerte.
La artista callejera rusa Julia Volchkova recurrió a las redes sociales para compartir que uno de sus murales en Kuala Lumpur fue blanqueado sin ninguna explicación.
Anteriormente, la pared mostraba la pintura del hombre de 35 años de un orfebre en pleno trabajo.
No está claro si Julia había solicitado previamente la aprobación del propietario del edificio.
“Todo el mundo pregunta por qué, por qué, por qué. No lo sé. También quiero saber el motivo. Si alguien sabe el verdadero motivo, por favor, díganmelo”, suplicó en las redes sociales.
Julia admitió que el hecho de que su obra sea pintada encima “es doloroso porque el arte es [her] niños” y continuó compartiendo que esta obra de arte en particular “fue muy difícil” y se hizo en “condiciones insoportables”.
Comenzó a pintar murales en Malasia hace más de dos décadas, y algunas de sus obras más famosas incluyen ‘El barquero indio’ y ‘El niño indonesio’ en Penang.
“He invertido mi tiempo, mi conocimiento y mi salud en ello. [the goldsmith]”, dijo antes de compartir que ha desarrollado problemas de salud después de años de crear un trabajo físicamente exigente.
También le pareció extraña la retirada de su obra, ya que cree que el mural es un “indicador del patrimonio cultural de Malasia para el mundo”.
“Era un punto de referencia muy importante, un lugar turístico que la gente viene a visitar”, añadió antes de admitir que, como artista callejero, es común que pinten sobre tu trabajo.
Umm… En este punto, ¿por qué se preocupa de nuevo por la eliminación?
Los internautas también parecen estar divididos sobre su reacción.
Aunque muchos se pusieron del lado de Julia y pidieron que los malasios comprendieran más las artes, otros dieron una opinión más matizada sobre la eliminación de su mural.
“El edificio podría haber cambiado de propietarios, quienes preferían una fachada limpia”, explicó un usuario en línea.
Un supuesto pintor de grafitis incluso cuestionó los motivos de Julia diciendo: “El arte callejero es temporal. ¿Es necesario crear drama sobre su eliminación?”