bethenny frankel está sufriendo… y los síntomas suenan terribles.
Bethenny reveló entre lágrimas su lucha el jueves, sabiendo que sus fanáticos notarían instantáneamente que su rostro se veía extraño. Ella dice que todo está relacionado con su lucha contra la enfermedad POTS, un trastorno de la circulación sanguínea que se asocia con hinchazón, dolor extremo, aumento de peso y, lo peor de todo, deshidratación.
Bethenny dice que la deshidratación está afectando su vida de manera profunda… no puede retener agua y tiene todo tipo de consecuencias para su salud. Sus médicos dicen que todo está relacionado con POTS.
La mujer de 52 años dice que su enfermedad se ha magnificado desde el COVID y que no hay cura, por lo que realmente está luchando.
Su peor temor… que ella no estará presente para Bryn, su hija de 12 años. Bethenny lo está superando todo, practicando snowboard en Aspen el miércoles con Bryn.