Hace un mes, el multimillonario Elon Musk advirtió que si Donald Trump ganaba un segundo mandato presidencial y le daba un papel en el gobierno, los estadounidenses necesitarían “reducir el gasto para vivir dentro de nuestras posibilidades” y sufrir “dificultades temporales” para poder abordar la crisis nacional. deuda. El martes, el director ejecutivo de Tesla parecía más cerca de lograr ese objetivo después de que el presidente electo anunciara que Musk y Vivek Ramaswamy liderarán un nuevo “Departamento de Eficiencia Gubernamental” (DOGE).
Los dos empresarios tendrán la tarea de allanar el camino para que la administración de Trump “desmantele la burocracia gubernamental, reduzca el exceso de regulaciones, reduzca los gastos innecesarios y reestructure las agencias federales”, dijo Trump en un comunicado.
Añadió que DOGE podría “convertirse, potencialmente, en el ‘Proyecto Manhattan’ de nuestro tiempo. Los políticos republicanos han soñado con los objetivos de ‘DOGE’ durante mucho tiempo” y que el departamento se asociaría con la Oficina de Gestión y Presupuesto (OMB) de la Casa Blanca. No estaba claro exactamente cómo DOGE “brindaría asesoramiento y orientación desde fuera del gobierno”.
En la declaración compartida por Trump, Musk declaró que DOGE “enviará ondas de choque a través del sistema y a cualquiera involucrado en el desperdicio del gobierno, ¡que es mucha gente!”
“Lo más importante es que eliminaremos el despilfarro y el fraude masivos que existen en nuestro gasto público anual de 6,5 billones de dólares. Trabajarán juntos para liberar nuestra economía y hacer que el gobierno de Estados Unidos rinda cuentas ante ‘NOSOTROS EL PUEBLO’”, continuó Trump. El presidente electo finalizó afirmando que el trabajo de DOGE “concluirá” a más tardar el 4 de julio de 2026, y que un “gobierno más pequeño” será el “regalo perfecto” para el pueblo estadounidense, marcando el 250 aniversario de la Declaración de Independencia.
Musk, uno de los megadonantes de Trump durante su campaña, es un importante contratista del gobierno y beneficiario del gasto federal. Su empresa SpaceX tiene varios contratos federales, incluido un contrato de 1.800 millones de dólares. contrato con una agencia de inteligencia para construir una red de vigilancia global con satélites. Se espera que el hombre más rico del mundo reciba una ganancia financiera colosal gracias a las políticas procorporativas de una segunda administración Trump.
La ley tributaria que Trump firmó en 2017, que redujo drásticamente las tasas impositivas para las corporaciones y los ricos, ha contribuido en gran medida al déficit nacional. El presidente electo se ha jactado de recortar impuestos a las capas más ricas del país. Trump prometió mantener esos recortes de impuestos y propuso un nuevo recorte de la tasa del impuesto corporativo.