Farandulero
Paul Simon realizó una rara presentación pública el sábado en el Newport Folk Festival, apareciendo sin previo aviso al final de un tributo a su música dirigido por Nathaniel Rateliff y Night Sweats. Simon anunció su retiro de las giras en 2018 y, desde entonces, solo ha actuado esporádicamente en público. (Su última actuación fue en abril pasado, en otro homenaje a sí mismo en Los Ángeles)
La aparición de Simon en el festival fue una completa sorpresa: incluso el hecho de que Rateliff y los Night Swears cerraban la velada rindiendo homenaje a Simon no se había anunciado hasta que subieron al escenario el sábado por la noche.
Su set de cuatro canciones el sábado en el Newport Folk Festival fue una de las pocas (y más largas) actuaciones de Simon en los más de dos años desde que comenzó la pandemia.
Acompañado por los Night Sweats y Jerry Douglas a la guitarra, el cantante de 80 años comenzó su actuación con «Graceland» antes de ceder el micrófono a Rhiannon Giddens para una interpretación especial actualizada de «American Tune». Luego de guiar a la multitud a través de un final para sentirse bien de «The Boxer» con Douglas, Lucius, Rateliff y Lukas Nelson (a quien presentó como «un viejo amigo de la familia»), Simon hizo una reverencia y luego cerró la noche para siempre tocando “El Sonido del Silencio” por él mismo.
Como dijo Simon: “Es un honor ser honrado”.
