El cantante, que lleva 27 años en la industria, solía hospedarse en un pequeño apartamento bastante alejado de la ciudad y de la emisora. Había estado ganando menos de 1000 dólares singapurenses al mes y, aunque llevaba un registro meticuloso de sus gastos, simplemente no podía permitirse comprar agua potable.
Pero se había dado cuenta de que el banco de abajo tenía un dispensador de agua, por lo que iba al banco con el pretexto de retirar dinero en efectivo y, en su lugar, rellenaba una botella de plástico de dos litros de agua potable. Y continuó haciendo esto durante unos buenos seis meses.
Curiosamente, Tony no explicó en el programa por qué no hirvió agua en casa.
Cuando los otros invitados le preguntaron si se sentía avergonzado de llevar una botella tan grande de agua ‘robada’ a casa, Tony dijo: «Cuando eres pobre, te vuelves más duro y no te importan estas cosas pequeñas».
Fotos: Sinchew Noticias