Farandulero
Barry Diller criticó el nivel de seguridad en el centro de París de cara a la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de 2024 el viernes, que romperá con la tradición al desarrollarse en el río Sena en lugar de en un estadio.
Francia ha montado una operación de seguridad sin precedentes enviando a 45.000 policías y 18.000 militares a la capital francesa.
El centro está cerrado bajo un sistema de seguridad de tres niveles, que establece una zona gris cerca del río y las áreas alrededor de las sedes olímpicas clave, a las que está prohibido el acceso de la mayoría de las personas, mientras que una zona roja está abierta a los peatones y al tráfico. A las 6:30 p. m. hora local (9:30 p. m. hora del Pacífico), se cerrará el espacio aéreo dentro de un radio de 150 km (93 millas) de París.
«Los Juegos Olímpicos son una hermandad de amistad y deporte, y todas las cosas buenas, y lo estamos haciendo literalmente en un campamento armado», dijo Diller al presentador de Squark Box de CNBC, Andrew Ross Sorkin, en una entrevista en su estudio de los Juegos Olímpicos en París.
Mientras hablaba con el Arco del Triunfo de fondo, la entrevista estuvo interrumpida por el sonido de las sirenas de la policía.
“Lo que quiero decir es que se escucha de fondo, no puedes salir y no escuchar las sirenas constantemente. Nunca había visto tantos vehículos armados y ametralladoras y todo lo demás”, continuó. “Es extraño en esta ciudad que normalmente es alegre y pacífica”.
Las declaraciones se produjeron apenas horas después de un ataque de sabotaje a las líneas ferroviarias de alta velocidad que entran y salen de París en las primeras horas del viernes, que provocó graves trastornos en la red ferroviaria francesa, en lo que ya se perfilaba como un día de viaje complicado debido a la ceremonia de apertura y la temporada alta de vacaciones.
El multimillonario magnate de los medios y habitual de los Juegos Olímpicos, Diller, se encuentra entre una serie de personalidades de los medios y el entretenimiento de Estados Unidos que han viajado a París para los Juegos de 2024 y su ceremonia inaugural de alto riesgo. También fue invitado a la elegante fiesta «Preludio a los Juegos Olímpicos» en la Fundación Louis Vuitton el jueves por la noche.
Como miembro de la junta directiva de Coca Cola, principal patrocinador de los juegos, Diller se hospeda en el hotel que alberga a los ejecutivos de Coca Cola en la zona gris, que también alberga a la Primera Dama Jill Biden, quien representa al presidente Joe Biden en París.
Diller sugirió que hubo un error en el acceso al hotel el jueves por la noche después de la fiesta Preludio debido a las estrictas restricciones de seguridad que casi resultaron en que agentes de los servicios secretos lo sacaran.
“Anoche casi me dispara el servicio secreto”, contó. “Aunque tenemos un apartamento aquí, no pude ir porque está en la zona roja. Así que estoy en el hotel Coca Cola”.
“Desafortunadamente, la señora Biden está en el hotel Coca Cola. Anoche regresé desaliñado por el día y todo este ruido y fui a cruzar la barrera y no me dejaron pasar. Treinta minutos después, pensé: ‘¿Sabes qué? Al diablo, soy ciudadana estadounidense’… y comencé a caminar y estaba cerca, casi me derriban».
Diller fue uno de los grandes partidarios de los demócratas que encabezaron la campaña para pedir que Biden renuncie como candidato demócrata en las próximas elecciones presidenciales de Estados Unidos.
Sorkin sugirió en broma que el trato que recibió el magnate en el hotel no tenía nada que ver con su campaña contra Biden.
—No, creo que sí, porque ella… [Jill Biden] “Claramente me odia porque estuve involucrado en el proceso”.
