Farandulero
Hay quien se empea en vincular ‘RMN’ con palabras como «auge», «actual», «virus» o «extrema derecha», evidenciando una miopa quien sabe si interesada y nada casual. La nueva pelcula de Cristian Mungiu transcurre en la actualidad, en Rumania, en Europa, pero como bien dice el propio cineasta trata sobre algo que «pueda estar presente en todos los lados y que se podra reproducir en cualquier parte del mundo». Una historia de intolerancia, xenofobia e inseguridad que en realidad, llegado un momento dado, nos est retratando a todos y cada uno.
Porque somos nosotros y nuestra circunstancia. Y a menudo la circunstancia puede ms que nosotros, siendo imposible ser siempre fiel a quien creemos que somos o podemos ser. Matthias, por ejemplo, el protagonista de la película, comienza siendo un inmigrante en Alemania para luego sentir resquemor hacia los inmigrantes una vez regresa a su pas. ¿Racismo? ¿intolerancia? ¿Odio? No tiene por qué, siendo esta una de las principales razones que hacen de ‘RMN’ una película tan poderosa. Incluso quien sabe si… es necesario?
S, ‘RMN’ habla de Rumania. De Europa. Del machismo. De la xenofobia. De la naturaleza. Del miedo. De la violencia. Del egosmo (antes que de la intolerancia). De muchas cosas. Pero no siempre de un «auge», de la «actualidad», de un «virus» o de «extrema derecha» como si estos problemas no tuvieran que ver con la sociedad de la que formamos parte. Es un relato de clara vocación universal desarrollado con cotidianidad, cercana y sobre todo un temible, voluble e precario sentido común que hacen de ella una película sumamente creble.
Como durante el magistral plano fijo de 17 minutos que reanuda la escena de la asamblea. ‘RMN’ es una pelcula incmoda porque de una manera u otra, ya sea de manera explcita o implcita, podemos sentir la realidad que nos rodea reflejada en ella. Porque estos problemas tienen sus razas en la naturaleza del propio ser humano. De su historia. De la hipocresa de la sociedad. De esa falsa democracia plagada de contradicciones. De ese progreso tan supeditado al capitalismo. De esa circunstancia de la que somos tan hijos como esclavos.
Bajo su apariencia de thriller rural cocido a fuego lento, ‘RMN’ atrapar por su capacidad para dar tanto de qu pensar. Por la habilidad con la que dosifica y presenta la información, trenza lo íntimo con lo político y realiza un retrato implacable mediante trazos bien escogidos, tanto de los personajes como de esta realidad, tan actual como atemporal. Por resumir: La sociedad, ya sea cualquier sociedad, está edificada sobre un polvorín de pestañas, prejuicios, miedos, inseguridades e intereses que amenazan con explotar a la más mínima ocasión.
Esto es, ‘RMN’, en el fondo, habla de la fragilidad del ser humano. De como las circunstancias, le pongamos las etiquetas que queramos ponerle, pueden sacar de cada uno de nosotros nuestras peores/mejores versiones.
Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex
